Sherrymaster nace en 2013, en su formato presencial, con un programa de dos jornadas durante las cuales Antonio Flores, enólogo y master blender de Tío Pepe, la bodega jerezana de González Byass, va guiando a los participantes a través del apasionante mundo de los vinos de Jerez. El programa comprende visitas al viñedo, a la bodega, catas, ponencias y la intervención de Pitu Roca, sumiller del Celler de Can Roca, como invitado estrella dirigiendo su propia cata. Desde entonces, el Sherrymaster se repite año tras año, y a partir de mediados de 2020 estrena su derivada virtual.
Así, el Sherrymaster on-line es un curso de introducción a los vinos de Jerez que recoge el espíritu del Sherrymaster original pero amplía su espectro de alumnos y, por supuesto, la flexibilidad para realizarlo. A diferencia de la versión original, no está únicamente orientado a profesionales (que también), ni cuenta con tan solo 35 plazas, sino que cualquier aficionado puede inscribirse.
El Sherrymaster on-line Tío Pepe, al detalle
Tanto para informarte sobre su contenido como para inscribirte, el Sherrymaster on-line cuenta con una página web propia: online.sherrymaster.com. Supongamos que, como nosotros, has decidido que vas a hacer el curso. Tan solo deberás rellenar un formulario para inscribirte y abonarlo a través de la web. Acto seguido, recibes un e-mail con un enlace y un código que te permite acceder a la plataforma en la que están colgados los materiales didácticos, que son 23 vídeos de unos cinco minutos de duración estructurados en torno a cuatro módulos (viticultura, producción, coctelería y servicio de los vinos de Jerez), cada uno de los cuales va acompañado de su correspondiente PDF.

Cada vídeo puede ser visto las veces que desees, y los PDFs, que resumen esquemáticamente los contenidos de las lecciones, pueden descargarse para ser consultados donde y cuando quieras. Y una vez que se ha completado la visualización y el análisis del material didáctico, llega la mejor parte: la cata de seis vinos de Jerez, dirigida en vivo por el propio Antonio Flores, enólogo y master blender de González Byass, o por la winemaker assistant Silvia Flores. Y es que junto con el código para acceder a la plataforma, vas a recibir en tu domicilio, en el plazo de una semana (menos, en nuestro caso) una caja con seis muestras de diferentes estilos de Jerez con las que podrás participar en una cata on-line que todos los meses organiza a tal efecto Tío Pepe.
Los vídeos del Sherrymaster on-line Tío Pepe
El Sherrymaster on-line es eminentemente un curso audiovisual. En general, en Nos Vamos de Vinos somos más de leer que de ver vídeos, pero el formato nos ha gustado más de lo que preveíamos. Hay tres aspectos clave. En primer lugar, son vídeos muy directos; dan mucha información en poco tiempo. Además, el contenido se encuentra bien estructurado; obviamente, hay lecciones que interesarán más a quienes vengan del mundo de la hostelería, y otras que serán más útiles para estudiantes de cualquier materia relacionada con la elaboración del vino. Por supuesto, no cabe esperar mucha complejidad, pero, siendo honestos, prácticamente en todos los capítulos había algo que desconocíamos, datos relevantes o, simplemente, la oportunidad de ver imágenes de algo que conocíamos pero que, quizá, nunca habíamos podido contemplar tan detalladamente, como por ejemplo una oruga mecánica aserpiando un suelo de albariza. Por último, se trata de unos vídeos bien producidos, con imágenes de calidad y un sonido limpio, algo que se agradece teniendo en cuenta que sus protagonistas no son profesionales de la comunicación, sino expertos en diferentes aspectos del cultivo de la vid o de la elaboración del vino en el Marco de la Jerez.

Técnicamente, se trata de vídeos incrustados en una página web, con su propio reproductor. Puedes elegir la resolución (hasta Full HD), regular el volumen y visualizarlos a pantalla completa, pero no podrás descargarlos ni mandarlos directamente a un monitor o un televisor mediante Chromecast.
La cata de los vinos del Sherrymaster on-line
Pero si la teoría resulta interesante, es en la práctica donde todo cobra sentido. Para llevarla a cabo, recibirás un enlace de Google Meet, por lo que lo primero que debes hacer es comprobar que tienes descargado el programa y que funciona. Te recomendamos que te tomes un tiempo para preparar el espacio de cata siguiendo las típicas recomendaciones: un lugar cómodo, sin olores fuertes, bien iluminado con una luz neutra, un fondo blanco para observar los vinos, agua y unos picos para lavar la boca entre vino y vino.

También te aconsejamos que descapsules las pequeñas botellas de las muestras antes del inicio de la cata (ya que puede llevarte más tiempo de lo que parece), que las atemperes y que las sirvas en seis copas iguales. Los más ortodoxos preferirán usar catavinos, pero nosotros somos partidarios de copas más grandes que permitan que los vinos liberen una mayor concentración de aromas.
Desde la plataforma puedes bajarte un mantel de cata en el que están impresos los nombres de los vinos, su grado alcohólico y las variedades con las que se elaboran. Es siempre práctico para ayudarte a no desordenar las copas. Además, su color blanco permite apreciar las diferencias tonales de las muestras.
Finalmente, la cata servirá para dar un repaso a algunos de los temas abordados durante el Sherrymaster, antes de pasar a analizar cada uno de los vinos, comenzando por el clásico Fino Tío Pepe, seguido por el Amontillado Viña AB (sin duda, uno de nuestros favoritos), con el Oloroso Alfonso a continuación (otro vino que hemos catado en más de una ocasión y que ofrece una fabulosa relación calidad/precio), el Palo Cortado Leonor, el Cream Solera 1847 (una especialidad que no solemos degustar pero que conviene conocer) y Néctar, un vino dulce elaborado con uva Pedro Ximénez.
En nuestro caso, fue Silvia Flores la encargada de dirigir la cata, que contaba con la presencia de José Manuel Harana, capataz coordinador de viña y uno de los protagonistas de los vídeos del cursos. Y si quieres repasar conocimientos, puedes apuntarte a posteriores convocatorias de la cata on-line tantas veces como lo desees.

Nosotros hemos disfrutado de toda la experiencia: desde la recepción de las muestras en casa hasta la cata, pasando por la visualización de las lecciones. Nos parece un fantástico y original regalo para cualquier persona a la que le guste el vino. Y, desde luego, nos ha abierto el apetito para hacer un día el legendario Sherrymaster presencial.