Palos de Viento 2019 y Besos de Lobo 2019

Una bodega abandonada desde los años setenta, nombres salidos de un libro de cuentos, un paraje cuidado desde hace medio siglo y cientos de fotos que narran la historia de una viña condensadas en un par de collages; todo esto y mucho más es Paraje Finca La Hoya.

En 2016, Salva Caballero decide elaborar vino con las uvas del paraje Finca la Hoya, las viñas que su padre empezó a cuidar en 1972. Para ello, recupera una antigua bodega construida a finales del siglo XIX y caída en desuso en los años setenta. En ella, Salva elaborará dos vinos: Palos de Viento y Besos de Lobo, dos vinos que deben su nombre a un libro de cuentos escrito por Juan Clemente, amigo de la familia, y que Salva leía a sus hijos por las noches; dos vinos vestidos con sendos collages que el artista argentino Matías Varela realizó partiendo de fotos que Salva había hecho durante los años al paisaje de Finca la Hoya.

Palos de Viento 2019 y Besos de Lobo 2019 son dos monovarietales de Monastrell (plantada entre 1980 y 1990) y Garnacha (de 2000 a 2002), respectivamente. Las viñas, conducidas en vaso y cultivadas en secano, se encuentran en laderas de orientación norte con suelos calizos y gravas en la superficie.

Tras una vendimia manual, las uvas pasan por mesa de selección y fermentan en depósitos de inox con control de temperatura. Durante la maceración, se realizan bazuqueos manuales y remontados diarios, tras lo cual Palos de Viento hace ocho meses de crianza en barricas de roble de 330 y 500 litros, dos meses menos que Besos de Lobo.

Palos de Viento 2019 Cuento
Palos de Viento 2019 Monastell

Palos de Viento muestra un color rojo picota de capa alta y ofrece aromas a fruta negra madura (ciruela) y especias. En boca es un frutal, con buena acidez y un tanino rústico pero domado en un trago levemente balsámico y bastante largo, con un posgusto licoroso.

Por su parte, Besos de Lobo exhibe un color cereza de capa media baja y una nariz especiada, con fruta roja fresca y flores silvestres. En boca es también frutal, de buena acidez y taninos dulces en un trago medio largo, con una leve sensación alcohólica y un posgusto a regaliz.

Son dos buenos vinos que muestran un paraje y el cariño que une a tres generaciones a través de un viñedo, una bodega y un libro de cuentos.

VinoAlcoholProducciónPrecio (75 cl)
Palos de Viento 201915 %1.970 botellas de 75 cl13,90 euros
Besos de Lobo 201914,5 %1.950 botellas de 75 cl13,90 euros
Otros datos: Palos de Viento 2019: pH: 3,60. Acidez Total (tartárico): 5,00 g/l. Besos de Lobo 2019: pH: 3,45. Acidez Total (tartárico): 5,10 g/l. 
Besos de Lobo 2019 Cuento
Besos de Lobo 2019 Garnacha

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Palos de Viento 2019 and Besos de Lobo 2019: Two chapters of a bottled tale that narrates a terroir

An abandoned winery since the seventies, names from a fairy tale book, a landscape that has been cared for for half a century, and hundreds of photos that tell the story of a vineyard condensed into a couple of collages; all this and much more is Paraje Finca La Hoya.

In 2016, Salva Caballero decided to make wine with the grapes from Finca La Hoya, the vines that his father started to care for in 1972. To do this, he revived an old winery built at the end of the nineteenth century that had fallen into disuse in the seventies. Here, Salva would make two wines: Palos de viento and Besos de lobo, two wines named after a fairy tale book written by Juan Clemente, a family friend, and which Salva read to his children at night; two wines dressed in collages made by Argentine artist Matías Varela, based on photos of the Finca La Hoya landscape that Salva had taken over the years.

Palos de Viento 2019 and Besos de Lobo 2019 are two single-varietal wines made from Mourvèdre (planted between 1980 and 1990) and Grenache (from 2000 to 2002), respectively. The vines, trained in goblet and dry farmed, are located on north-facing slopes with calcareous soils with gravel on the surface. After a manual harvest, the grapes pass through a selection table and ferment in stainless steel tanks with temperature control. During maceration, manual punch-downs and daily pump-overs are carried out, after which Palos de Viento spends eight months aging in 330 and 500-liter oak barrels, two months less than besos de lobo.

Palos de Viento has a high-layered picota red color and offers aromas of ripe black fruit (plum) and spices. In the palate, it’s fruity, with good acidity and a rustic but tamed tannin in a slightly balsamic and quite long sip, with a liqueur-like aftertaste.

On the other hand, Besos de Lobo exhibits a medium-low layer cherry color and a spicy nose, with fresh red fruit and wild flowers. In the palate, it’s also fruity, with good acidity and sweet tannins in a medium-long sip, with a slight alcoholic sensation and a licorice aftertaste.

They are two good wines that showcase a landscape and the love that unites three generations through a vineyard, a winery, and a fairy tale book.

Palos de Viento 2019 y Besos de Lobo 2019 Corchos
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