Con solo ver su botella azul, la mayoría pensamos en Galicia, en el mar Cantábrico, en Albariño; con solo ver su botella azul, la mayoría pensamos en Mar de Frades. Y es que esta bodega, perteneciente al grupo Zamora Company, ha conseguido que el azul de sus botellas sea su imagen de marca, el perfecto vestido para su albariño atlántico.
Estamos hablando de una bodega con seis referencias en su catálogo: Mar de Frades Albariño Atlántico –su entrada de gama y su vino más conocido–, Mar de Frades Godello –la rara avis de esta bodega asentada en Rías Baixas–, Mar de Frades Brut Nature –un espumoso de método tradicional– y tres vinos de finca, entre los que se encuentra nuestro protagonista de hoy.
Finca Lobeira 2019 es un varietal de Albariño (97 %) con un ligero aporte de Godello, Caíño Blanco y Loureira (3 %), provenientes de una parcela situada en la vertiente norte del monte Lobeira. Esta viña de 7,97 hectáreas, plantada en 2004 a 134 metros de altitud sobre suelos de granito descompuesto, está rodeada de un bosque de pinos y eucaliptos.
Tras una vendimia manual en pequeñas cajas, los racimos llegan a la bodega y pasan por una mesa de selección antes de ser prensados con raspón. El mosto fermenta, con levaduras autóctonas, durante quince días en depósitos de acero inoxidable a una temperatura de 15,5 ºC. El vino reposa con sus lías finas en un depósito de acero inoxidable durante todo el año 2020. La crianza se alarga durante 2021 –con batonages cada quince días– y durante 2022 –con batonages semanales–, siempre en depósitos de acero inoxidable. En 2023, el vino se embotella y se deja reposar en bodega hasta su salida al mercado.
Finca Lobeira 2019 se presenta en copa con un color amarillo entre pajizo y limón con reflejos dorados. En nariz predomina la fruta de hueso, acompañada de notas minerales, de monte bajo y cítricas. En boca tiene una buena acidez en un trago fresco, intenso y bastante largo, con un final ligeramente salino; un trago que va vestido de azul, ese azul que nos hace pensar en Galicia, en el mar Cantábrico y en Albariño, el azul icónico de la botella de Mar de Frades.
| Vino | Alcohol | Producción | Precio (75 cl) |
| Finca Lobeira 2019 | 13,2 % | 3.750 botellas de 75 cl. | 55,59 euros- |
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Finca Lobeira 2019: An albariño wrapped in Mar de Frades’ iconic blue bottle
Just by seeing its blue bottle, most of us think of Galicia, the Cantabrian Sea, and Albariño; just by seeing its blue bottle, most of us think of Mar de Frades. This winery, part of the Zamora Company group, has successfully made the blue of its bottles its brand image, the perfect attire for its Atlantic Albariño.
We’re talking about a winery with six references in its catalog: Mar de Frades Albariño Atlántico – its entry-level and most well-known wine – Mar de Frades Godello – the rare gem of this Rías Baixas-based winery – Mar de Frades Brut Nature – a traditional method sparkling wine – and three estate wines, among which is our protagonist today.
Finca Lobeira 2019 is a varietal Albariño (97%) with a slight addition of Godello, Caíño Blanco, and Loureira (3%), sourced from a plot located on the northern slope of Mount Lobeira. This 7.97-hectare vineyard, planted in 2004 at an altitude of 134 meters on decomposed granite soils, is surrounded by a forest of pines and eucalyptus.
After a manual harvest in small crates, the clusters arrive at the winery and pass through a selection table before being pressed with stems. The must ferments, with indigenous yeast, for fifteen days in stainless steel tanks at a temperature of 15.5 ºC. The wine rests on its fine lees in a stainless steel tank throughout 2020. The aging continues through 2021 – with batonnage every fifteen days – and 2022 – with weekly batonnage – always in stainless steel tanks. In 2023, the wine is bottled and left to rest in the winery until its release.
Finca Lobeira 2019 presents in the glass with a yellow color between straw and lemon with golden highlights. On the nose, stone fruit predominates, accompanied by mineral, underbrush, and citrus notes. On the palate, it has good acidity in a fresh, intense, and fairly long sip, with a slightly saline finish; a sip dressed in blue, that blue that makes us think of Galicia, the Cantabrian Sea, and Albariño, the iconic blue of the Mar de Frades bottle.
