Nuestro año es solar. Tiene dos equinoccios, otros tantos solsticios, cuatro estaciones que se repiten indefinidamente; el sol tiene la clave. Pero para quienes entienden el viñedo desde una perspectiva biodinámica, las lunas mandan, las 12 lunas que «caben» en un año.
12 Lunas Tinto 2016 es un coupage de Cabernet Sauvignon (52 %), Tempranillo (32 %), Garnacha (13 %) y Syrah (3 %). Cada variedad se vendimia, fermenta, macera e incluso envejece en barricas usadas de roble francés según sus propias reglas, si bien la media de envejecimiento es de unos nueve meses. El vino, ya ensamblado, se deja reposar para que se decante, ya que ni se clarifica ni se filtra.
En nariz encontramos fruta roja (fresas y frambuesas), caramelo y tostados. Su boca es sedosa, golosa, con la fruta madura en primer plano, en un trago medianamente largo, de final persistente, láctico y algo alcohólico, sensación esta última que protagoniza el retronasal.
Y tú ¿eres solar, eres lunar, eres lunisolar? En realidad no importa demasiado; seguro que coincides en que este 12 Lunas es tremendamente fácil de beber, realmente adictivo y, en resumen, perfecto para los lunáticos del vino.
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We use the solar year. It has two equinoxes, as many solstices, four seasons that repeat indefinitely. The sun is the key. But for those who understand the vineyard from a biodynamic perspective, the moons rule, the 12 moons that «fit» in a year.
12 Lunas Tinto 2016 is a blend of Cabernet Sauvignon, Tempranillo, Grenache and Syrah. Each variety is harvested, fermented, macerated and aged in used French oak barrels according to its own rules, although the average aging is about nine months. The wine is blended and rests for a while to avoid being clarified nor filtered.
On the nose we find red fruit, caramel and toasted. Its palate is silky, sweet, with ripe fruit in the foreground, in a quite long sip, with a persistent, lactic and somewhat alcoholic ending.
So are you solar, are you lunar, are you lunisolar? It doesn’t really matter. Surely you will agree this wine is easy to drink, addictive and, in short, perfect for wine lunatics.
