¿Qué haces cuando, poco antes de la vendimia, la bodega con la que tienes apalabrada la venta de unas uvas te dice: “Lo siento, Ismael, no tenemos espacio en bodega para recibir tus uvas”?
Pues Ismael Gozalo y su equipo lo tuvieron claro: remangarse, limpiar una bodega que llevaba más de 35 años sin utilizarse, y lavar las antiguas tinajas que allí había; cualquier cosa antes de dejar la uva en la viña. Y así es como nació nuestro protagonista de hoy
La Resistencia Contra el Marqués ancestral 2019 es un monovarietal de Verdejo. Tras una vendimia temprana, las uvas son despalilladas y prensadas, y el mosto se deja desfangando a baja temperatura durante unas horas, para luego llenar con él las tinajas donde fermentará, con levaduras autóctonas. La fermentación acabará en botella, lo que suele tardar unos dos o tres meses. Las botellas son degolladas a la volé y rellenadas con el mismo vino, se les coloca una chapa y se dejan reposar unos meses más para que el carbónico esté bien integrado.
De un color amarillo limón ligeramente turbio, su nariz es limpia, y en ella encontramos manzana verde y notas de campo. En boca aparecen los cítricos y la pera, acompañados nuevamente de notas silvestres y un toque amargo. Es un vino muy rico, fresco, de trago medio, con una burbuja fina y bien integrada, la muestra de que la resistencia contra el marqués ha ganado la batalla.
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What do you do when, shortly before the harvest, the winery with which you have commited the sale of grapes tells you: «I’m sorry, Ismael, we don’t have space in the winery to receive your grapes»?
Well, Ismael Gozalo and his team had it clear: to roll up their sleeves, clean a cellar that hadn’t been used for more than 35 years, and wash the old amphorae that were there; anything before leaving the grape in the vineyard. And this is how our protagonist of today was born
La Resistencia Contra el Marqués ancestral 2019 is a Verdejo single-varietal. After an early harvest, the grapes are destemmed and pressed, and the must is left to settle at a low temperature for a few hours, then fill the jars where it will ferment with indigenous yeasts. The fermentation will finish in the bottle, which usually takes about two or three months. The degorgement is a la volé, the bottles are filled with the same wine and they are left to rest for a few more months for the carbon dioxide to be well integrated.
Of a slightly cloudy lemon yellow color, its nose is clean, and in it we find green apple and notes of the countryside. Citrus and pear appear on the palate, again accompanied by country notes and a touch of bitterness. It’s a medium sip very tasty and fresh wine, with a fine and well-integrated bubble, the sign that the resistance against the Marquis has won the battle.