Pocos de los asistentes al madrileño Trianón Palace, hoy Teatro Alcázar, podían intuir que aquel viernes, 16 de junio de 1911, iban a presenciar un espectáculo que cambiaría la historia de la cultura popular de España y de parte del mundo. Aquella noche debutaba La Goya.

A partir de entonces, el cuplé se convirtió en cultura popular, y Aurora Mañanós Jauffret, “La Goya”, fue la Rosalía de la época. La Goya teatralizó las interpretaciones y llevó el conocido entonces como “género ínfimo” a cotas de popularidad nunca antes alcanzadas, orientándolo a un público más amplio, adoptando una nueva dimensión con escenografías y vestuarios propios para cada canción, componiendo ella misma sus propias melodías, sentándose al piano en escena, bailando y haciendo todo cuanto fuera necesario para seducir a sus espectadores y conseguir que aquel “género ínfimo” pasara a conocerse como “teatro de variedades”.

La Goya grabó discos, “giró” por Sudamérica repetidas veces, fue una auténtica diosa en Buenos Aires y su nombre artístico se convirtió en marca, ilustrando abanicos, cafés, perfumes… y hasta licores.

Así que cuando contemplamos la botella de esta manzanilla de Delgado Zuleta y leemos el nombre de La Goya en su tapón de rosca o en su etiqueta, somos conscientes de que estamos degustando un producto que nace en un lejano 1918 cuando Aurora, que veraneaba en Cádiz en la casa de los Delgado, permite a la bodega utilizar su nombre artístico en este monovarietal de Palomino fortificado y criado bajo velo de flor durante una media de siete años en las soleras que la bodega tiene en Sanlúcar de Barrameda.

Al catarlo encontramos un vino de color amarillo pálido con destellos dorados que destaca por su sutileza y su equilibrio tanto en la nariz como en la boca, con aromas a cítricos, florales y de frutos secos que dan paso a un trago reposado y sutil pero con el carácter propio de su elaboración y una embaucadora nota salina.

Es uno de esos vinos que, en buena compañía, desaparecen pronto de la copa y te invitan a abrir otra botella, tomándote un instante, eso sí, para observar la etiqueta de esta manzanilla que lleva más de un siglo luciendo por el mundo el nombre de La Goya.

VinoAlcoholProducciónPrecio
Manzanilla La Goya15 %4,25 euros (37,5 cl)
8 euros (75 cl)

Suscríbete a la newsletter de Nos Vamos de Vinos

* indicates required


Introduce tu e-mail para recibir nuestra newsletter y haz clic en el botón ‘SUBSCRIBE’


Detalle de una barrica. Nos Vamos de Vinos

Hemos creado este espacio para ti

Si quieres que los lectores de Nos Vamos de Vinos accedan a la web de tu bodega, distribuidora, tienda, vinoteca, hotel rural… a través de un enlace con foto como éste, te sorprenderá lo económico que es.

🇬🇧

La Goya: A little piece of popular history on the label of this popular manzanilla sherry

Few of the attendees at the Trianón Palace in Madrid, now the Teatro Alcázar, could intuit that that Friday, June 16, 1911, they were going to witness a show that would change the history of popular culture in Spain and part of the world. That night La Goya debuted.

From then on, cuplé became popular culture, and Aurora Mañanós Jauffret, “La Goya”, was the Rosalía of the time. La Goya theatricalized the performances and took what was then known as low genre to levels of popularity never before reached, searching for a broader audience, adopting a new dimension with sets and costumes for each song, composing her own melodies, sitting at the piano on stage, dancing and doing everything necessary to seduce his spectators and ensure that that “low genre” became known as “variety theater.”

La Goya recorded albums, she toured through South America repeatedly, she was a true goddess in Buenos Aires and her stage name became a brand, illustrating hand fans, coffees, perfumes… and even liquors.

So when we look at the bottle of this manzanilla from Delgado Zuleta and read the name of La Goya on its screw cap or on its label, we are aware that we are tasting a product that was born in a distant 1918 when Aurora, who used to spend the summer in Cádiz in the Delgado house, allows the winery to use its artistic name in this single-varietal Palomino fortified and aged under velo de flor layer of yeasts for an average of seven years in the soleras that the winery has in Sanlúcar de Barrameda.

Upon tasting it we find a pale yellow wine with golden sparkles that stands out for its subtlety and balance both in the nose and in the palate, with aromas of citrus, floral and dried fruits that give way to a restful and subtle drink but with the character of its preparation and a deceiving saline note.

It is one of those wines that, in good company, soon disappear from the glass and invite you to open another bottle, taking a moment, of course, to observe the label of this manzanilla that has been sporting La Goya name around the world for more than a century.

↓↓ Gracias por compartir este contenido ↓↓