En el corazón de la Denominación de Origen Rueda se encuentra La Seca, una pequeña población vallisoletana donde algunos irreductibles siguen elaborando las variedades autóctonas “de otra manera”: sin usar levaduras seleccionadas, sin intervenir apenas en el proceso de elaboración, sin buscar que la uniformidad se imponga a las características de la añada y dejando, en definitiva, que la Verdejo se exprese con todos sus matices, hasta el punto de que algunos de estos “irreductibles”, como nuestro protagonista de hoy, han tenido que salirse de las estrictas reglas de la denominación de origen para elaborar unos vinos diferentes, que te pueden gustar más o menos pero que en cada sorbo se muestran auténticos.
Bestia Parda 2017 es un monovarietal de Verdejo procedente de El Cuadro, en el Pago de Fuente Elvira, en La Seca, plantado sobre suelos pedregosos en superficie y arcillosos en el subsuelo, cultivado de manera orgánica y conducido en espaldera. El mosto de estas uvas fermenta con levaduras autóctonas en barricas de roble francés de 250 y 450 litros, donde permanece entre siete y ocho meses con batonages periódicos. El vino tiene una crianza sobre lías de un año en depósitos de acero inoxidable y de unos seis meses más en botella antes de salir al mercado.
Estamos ante un vino de un color amarillo intenso con reflejos metálicos, en cuya nariz encontramos fruta de hueso acompañada de notas ahumadas y tostadas, así como aromas de panadería. En boca es untuoso, con una muy buena acidez, en un trago estructurado y largo que termina con ese amargor final tan característico de la Verdejo más genuina. Es un vino diferente que, si lo pruebas, puede hacer que te conviertas en un “irreductible” bebedor de Verdejo auténtico.
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La Seca is in the middle of the Rueda Designation of Origin. It’s a small town in Valladolid where some irreducible people continue to make the autochthonous varieties «in another way»: without using selected yeasts, hardly intervening in the production process, without looking for the uniformity instead of the characteristics of the vintage and ultimately allowing Verdejo to express itself with all its nuances, to the point that some of these «irreducible» people, like our protagonist today, have had to go beyond the strict rules of the designation of origin to make different wines, that you may like or not, but wines that are authentic in every sip.
Bestia Parda 2017 is a Verdejo single-varietal from El Cuadro, in the Pago de Fuente Elvira estate, in La Seca, planted on stony soils on the surface and clayey in the subsoil, grown organically and conducted int trellis. The must of these grapes ferments with indigenous yeasts in 250 and 450 liter French oak barrels, where it remains between seven and eight months with periodic batonages. The wine is aged on lees for one year in stainless steel tanks and for about six more months in the bottle before hitting the market.
We are in front of a wine with an intense yellow color with metallic reflections. In the nose we find stone fruit accompanied by smoked and toasted notes, as well as bakery aromas. In the palate it’s unctuous, with a very good acidity, in a structured and long sip that ends with that final bitterness so characteristic of the most genuine Verdejo. It’s a different wine that, if you taste it, can make you become an «irreducible» sipper of authentic Verdejo.
